Los medios y la cultura de la violencia.

Cualquier abordaje que se haga del tema medios de comunicación debe partir de un análisis primario y toma de posición con respecto a una enorme serie de prejuicios y mentiras, que se dicen como verdades absolutas con respecto a los medios, producidas y repetidas por los mismos comunicadores, a veces en forma inconsciente y muchas otras con la clara intención de camuflar su mensaje y su real objetivo.

Los medios de comunicación tradicionales son y serán herramientas de control social, reproductores de la visión de las clases dirigentes y cumplen como tales una función variable que depende de los valores de quienes ostentan el poder. Por lo tanto, los medios están indisolublemente atados a los intereses de los capitales que los poseen en cuanto son propiedad privada pues viven de la publicidad y como se dice generalmente, quien paga la orquesta elige el repertorio.

A diferencia de los grandes medios de comunicación, los blogs permiten una transmisión de la información dinámica e independiente de los capitales, lo cual debe ser aprovechado al máximo por quienes utilizamos esta herramienta.

Los grandes medios tradicionales ejercen una suerte de dictadura en los criterios estéticos y de selección de la información, irrumpen con sus mensajes utilizando símbolos no compartidos por la totalidad de la población pero que de algún modo logran imponer el tono de la línea informativa, mostrando de este modo una especie de conciencia de esclavo de los comunicadores más alejados de la capital.

A mi entender, queda muy claro que de acuerdo a la selección del tipo de información y su desarrollo pueden definirse con claridad los patrones político-ideológicos de los comunicadores demostrando de esta manera que el periodismo es; después de la militancia partidaria; una actividad política por naturaleza.La formación de la llamada cultura de masas obedece en gran medida, al rol que juegan los medios de comunicación en la constitución de las sociedades modernas, sobre todo por parte de los medios audiovisuales. De hecho numerosos especialistas afirman que es imposible sostener a largo plazo una identidad cultural sin la producción de imágenes en movimiento, no por nada la televisión ha adquirido gran importancia.

Si entendemos la construcción de identidades sociales como las disputas simbólicas que se realizan entre distintos sectores para imponer valores, sentidos y patrones de comportamiento tal vez podamos llegar a comprender las razones por las cuales nuestra sociedad se encuentra agredida en la mismísima base de su cultura. (Recordemos que la televisión es el único medio que consumen adolescentes y niños).

La violencia estructural e institucional, es parte de los noticieros por doquier, al lado de la violencia delictiva, pero como videoclips, son imágenes inconexas en una especie de culto a la velocidad de la información en detrimento de los significados, los cuales son el único sentido de la comunicación, pues lo demás es sólo catarsis sin una dirección definida. La información tratada como una simple sucesión de imágenes tal como si fuera que hacemos zapping por la realidad, es particularmente peligrosa tratándose de hechos de violencia, y me refiero a toda la violencia que los noticieros muestran, no sólo aquella donde la sangre de las víctimas hace de pantalla de protección para ocultar los orígenes de la violencia radicada en garn parte en las acciones y omisiones del poder político.

La cultura impuesta por los medios de comunicación responde a la idea de globalización regida bajo las banderas del neoliberalismo, diseñado por los países más ricos para la dominación de los más pobres.

La violencia individual no es otra cosa que el reflejo de la violencia institucional, que en el caso de Argentina se ha ejercido sobradamente desde el estado, antes con la represión dictatorial, y ahora con la desocupación, la pobreza, el analfabetismo, la desprotección sanitaria y alimentaria y todo cuanto se les ocurra a los poderosos como garantía de supervivencia de sus privilegios y la dominación.

En muchas ocasiones se otorga a los periodistas el papel de juez y verdugo, de detective justiciero de la corrupción del poder, de defensores de una democracia joven e instituciones demasiado frágiles y débiles, pues este papel es muy grande para ser interpretado solamente por los periodistas.

Nuestra joven democracia requiere un periodismo, sobre todo el electrónico, mas científico y menos espectacular, dedicado a los significados. Un poco menos de soberbia y un poco más de fomento al espíritu crítico. Un poco más de tiempo para mostrar la realidad con el tañido de todas las campanas, en especial las de sonido más profundo.
Un periodismo que fortalezca los mejores aspectos de nuestra identidad y que sea respetuoso de las diferencias.

Marcos Bauzá.
(Editado del libro del periodista Koly Bader, Capitalismo, Neomafias y poder).

El Blog: Reflexión en Acción.

Un entrevistador del diario El Mercurio separado solamente por una laptop busca comprender lo que tiene para decirle un político chileno sobre el desarrollo e impulso de los blogs en el hermoso país tras la Cordillera de los Andes. Algunos comentarios son muy interesantes y son (a mi entender) dignos de ser mostrados en este blog. Dado que la nota es muy larga, me tomé la libertad (como siempre) de editar y apuntar los detalles más importantes.

La definición propuesta por Blogger.com respecto a lo que es un blog no se aleja demasiado de las ideas que tiene el senador Flores, en el sitio dicen que "Un blog puede definirse de forma sencilla como un sitio Web donde el usuario escribe periódicamente sobre cualquier tema, los blogs definitivamente han transformado Internet, han influido en la política, han revolucionado el periodismo y han permitido a millones de personas expresar sus opiniones y ponerse en contacto entre sí".

Eduardo Sepúlveda, dice brevemente lo que entendió de la explicación del senador Flores sobre los blogs, "son una especie de bitácoras en formato similar a una página web pero que tienen una dinámica muy distinta."
Fernando Flores intenta explicarle a su interlocutor de un modo simple algo que para muchos aún suena ajeno y complicado.

¿Qué es un blog?
Esa es una pregunta que me hacen siempre y yo creo que está equivocada. Las tecnologías son redes históricas de práctica, entonces lo que hay que preguntarse es qué es este aparato nuevo y para dónde va. Por ejemplo, la máquina de escribir se insertaba en una red de práctica. Se necesitaba la máquina, papel de calco, algo para borrar... y tenía una limitación. No cumplía ningún rol en la transmisión. Mientras que el computador no tiene calco, tiene una impresora, se puede reformular, pero, sobre todo, está en una red.

La tecnología digital es la red de redes. La pregunta es esa. ¿Qué es lo nuevo de los blogs? Uno no puede tampoco entender esto si no entiende la economía. Lo que hace interesantes a los blogs es que son gratis. Cualquiera puede armar un blog como puede armar un correo electrónico. Y eso tiene que ver con el desarrollo de las memorias y de los anchos de banda. Tú no necesitas tener un computador para tener un blog. Lo puedes ver desde la universidad, el colegio, el trabajo... lo que lo hace profundamente democrático. Es decir, el número de blogs puede ser mayor que el número de computadores.

Según http://www.technorati.com/, el motor de búsqueda de blogs más famoso, hoy en el mundo, existen 14,4 millones de ellos y este número se duplica cada cinco meses, aunque la situación de los blogs en latinoamérica es que casi nadie sabe qué son los blogs, por lo que Flores insta a explicarle a la gente lo que son los blogs.

Probablemente sea cierto que poca gente en Latinoamérica sepa con claridad lo que es un blog, por eso es importante aclarar el punto. Por ejemplo, ¿el blog es distinto a una página web?
Sí y no. Lo que hace la diferencia es que uno es estático y el otro es dinámico.

El blog no es otra cosa que reflexión en acción.

Hay que aprender algunas cosas muy básicas y listo. Uno no puede entender los blogs si no entiende cuatro cosas simultáneas: el blog mismo; los acumuladores, que son los RSS (Really Simple Syndication); los links; y el concepto de la blogósfera. Con esos cuatro conceptos uno ya comienza a comprender lo que yo llamo una "era". Porque no son una moda. Es como el internet, nadie puede decir que es una moda, es una cuestión que llegó aquí para estar. Y el mundo se va a dividir en un antes y un después de internet. Obviamente que los blogs sin internet tampoco son posibles.


Muchas de las cosas que los periodistas hablan sobre los blogs no son ciertas, porque son de gente que se está defendiendo en vez de subirse al carro de los poderosos. Los periódicos bien establecidos no van a tener ningún problema con esto. Los diarios se complementarán con los blogs. Los blogs son expresivos. Yo creo que hay que respetarlos como expresividad de alguien, o sea, alguien vivió una experiencia y la cuenta. Uno no está obligado a creer lo que dice. Pero si uno se da cuenta que hay 200 blogs hablando de lo mismo y los diarios no están hablando de eso, entonces vale la pena mirarlos.

Al periodista casi le cuesta creer que una herramienta tan aparentemente básica se le atribuya un poder transformador tan grande. Aunque debo confesar que yo también me muestro algo escéptico respecto de todos los supuestos cambios que puedan generar los blogs en el futuro de la sociedad pero coincido plenamente con que el fenómeno de los blogs permite que cualquier persona pueda tener un medio de comunicación propio y si se dan las condiciones tecnológicas adecuadas se puede producir un efecto "democratizador" muy importante y discusiones como la de la propiedad de los medios masivos perderá todo sentido, lo cual puede ser un gran dinamizador de cualquier sociedad.

El hecho de que un individuo o un grupo con los blogs pueden tener su propio medio. Eso efectivamente relativiza la discusión sobre la propiedad de los medios masivos. Yo creo que éstos van a tener que defenderse por marca y por calidad.

Lo dicho por mí anteriormente en la nota Del copista medieval al Blogger donde hablo sobre el movimiento blog cobra cada vez mayor sentido de manera que el bloggismo se está transformando, a medida que avanza su difusión, en una nueva forma de hacer periodismo, poniendo en jaque a algunos formadores de opinión y medios que pretenden posicionar una única versión de los hechos. En la medida en que el común de los ciudadanos participa de la utilización activa de un medio masivo de comunicación, crece la presión sobre la prensa convencional, esta es una afirmación innegable y sostenible por la cada vez más importante participación de las personas en el uso de las nuevas tecnologías.

Marcos Bauzá.

La mirada desde arriba.

Hasta no hace mucho tiempo se comentaba en las charlas de amigos en algún café o en un asado acerca de como los satélites observaban todas nuestras actividades cotidianas y por supuesto las respuestas de los interlocutores iban desde lo jocoso hasta la paranoia misma.
Aquellos planteos considerados por algunos como meros mitos urbanos o como situaciones típicas de una serie de ciencia ficción tienen ahora su comprobación fehaciente en uno de los últimos chiches tecnológicos: Google Maps, el nuevo buscador mundial de mapas y fotografías satelitales, que ya ofrece fotos de las principales ciudades del planeta.

Ya desde los comentarios del blog amigo Aguas Fuertes 2004, acerca del derecho a la privacidad de las personas, puede observarse la punta de un iceberg mucho mayor. Paterna se pregunta en su sitio acerca de la intromisión en la intimidad de los quehaceres cotidianos de la gente y si Google Maps y sus competidores de alguna manera interfirien en la vida del común de las personas, como una especie de gran hermano espacial. De este modo hace referencia a que "Así, y hasta un poquito mejor aún, se ve el barrio de la Paternal, en Buenos Aires desde un satelite... qué satelite no se... el de Google... o el que los EEUU le presta a Google para que lo usemos desde su página y hacernos creer que no solo lo usan para espiarnos, para meterse en nuestro desayuno y ver si estamos tomando mate o café con leche... o sin leche. O para ver qué clase de plantitas tenemos en la terraza. -continua diciendo- sepanlo, nos están espiando desde hace tiempo, y por si no lo notan la ciudad desde arriba se ve mucho más fea de lo que parece desde abajo".

Más allá de que no esté del todo de acuerdo con sus comentarios acerca de esta magnífica ciudad, el debate iniciado respecto de la privacidad tiene otras vertientes aún más escandalosas, relacionadas mas que nada con el caótico mundo en el que vivimos y la paranoia generada por el terrorismo y todos sus ribetes políticos.

En Weblogs sobre weblogs se preguntan si Google Maps afecta la seguridad nacional, dado las diferencias que hace el servicio de mapas de acuerdo a si el punto de interés es la sede del gobierno de Estados Unidos o el de cualquier gobierno del resto del mundo. De este modo puede verse que las terrazas de La Casa Blanca, en Washington se encuentran borradas o retocadas lo que no ocurre con otros sitios de relevancia política alrededor del planeta. No por nada en Barrapunto.com se interrogan acerca de la gran desproporción existente con respecto al acceso a este tipo de mapas que muestran "con todo lujo de detalle El Recinto de la Moncloa, donde vive el presidente de España, o El Palacio de la Zarzuela, donde viven los reyes de España, pero no así el lugar desde donde George Bush digita el destino del mundo. Con mucha razón estos españoles afirman que "la seguridad se cuida más para unos que para otros, ¿no? ¿Durante cuánto tiempo se podrán ver todas esta fotografías sensibles?"

En una nota muy interesante del periodista Pablo Romero en el diario El Mundo puede observarse que esta es una situación que no solamente tiene lugar con las vistas satelitales de España sino que "no es difícil encontrar vistas cenitales de edificios 'sensibles', como el recinto del Kremlin, en Moscú; el Palacio del Elíseo, sede de la Presidencia de la República Francesa en París, o el número 10 de Downing Street, en Londres, residencia oficial del primer ministro británico".

En Argentina, por esas cuestiones que tienen que ver con la concentración del poder y la falta de descentralización del estado tenemos de regalo y al mismo precio, todo en una misma imagen satelital a , la Casa Rosada, El Banco Central, El Ministerio de Economía y la Secretaria de Inteligencia del Estado y un poco más allá con ayuda de la geografía y un buen GPS podemos encontrar La Quinta de Olivos, donde reside el presidente.
En muchos países los temas relacionados a las nuevas tecnologías como el internet, y los diferentes softwares y herramientas que existen en él, no poseen una legislación adecuada o esta es totalmente inexistente. ¿Será ahora momento para empezar a cuestionarse acerca de estos temas que han sido dejados de lado?
...Es conocido por todos que cuestiones mucho más importantes como la alimentación, la salud, la educación, la vivienda y el trabajo son dejadas casi al azar debido al caos en el manejo de las políticas públicas, por lo cual no es difícil llegar a la conclusión de que este tema tampoco será tratado con la profundidad y seriedad que se merece en ninguno de los países periféricos latinoamericamos, al menos por el momento.
Marcos Bauzá.